Emprender, según la Real Academia Española, es embarcarse en una obra, un negocio, un empeño, especialmente si conllevan un grado de dificultad o peligro. Un acto que he vivido durante más de 25 años, 13 de ellos estrechamente vinculados con Aceleradoras, Startups, Mentores y Fondos de Inversión.
Hace un cuarto de siglo, nuestras herramientas eran diferentes. No contábamos con Smartphones, Internet de alta velocidad, la nube, Google, Facebook o Youtube. Medíamos nuestras finanzas en pesetas y Napster apenas despuntaba en el horizonte. No se puede negar que la tecnología ha guiado nuestras vidas profesionales y ha sido testigo de innumerables «nuevas tecnologías» que van y vienen.
Al hablar de emprendimiento, es común asociarlo con el mundo de las startups. Pero es importante recordar que el emprendimiento se extiende más allá, abarcando todas las esferas empresariales. Sin embargo, no podemos ignorar que el sector de las startups ha experimentado un crecimiento significativo y una profesionalización en los últimos años.
A lo largo del tiempo, se han creado ecosistemas emprendedores que facilitan desde la validación inicial de la idea hasta la captación de talento o financiación. Todos estos respaldados por la sólida estructura de las Aceleradoras, Mentores y Grupos de Inversión. Aunque se han cometido errores a lo largo del camino, también se han hecho mejoras significativas.
Mientras que las administraciones públicas han avanzado en sus instrumentos de apoyo al emprendimiento, todavía hace falta líderes privados que unifiquen y sumen a la causa, sin convertirse en el único motor del ecosistema emprendedor. Y es que como dice mi buen amigo Javier Artiach, todo ecosistema tiene un depredador en la cima de la pirámide alimentaria por lo que es preferible conseguir tener una agrupación de interés con un líder disruptivo.
Es interesante observar que la edad media de los emprendedores ha aumentado. Personalmente, creo que esto favorece la consecución de los objetivos, ya que con la edad viene la experiencia profesional.
Hoy en día, las Aceleradoras han reorientado sus programas hacia áreas específicas y han aumentado su nivel de profesionalización. Los eventos para emprendedores cada vez atraen a más personas y los Grupos de Inversión están también incrementando su nivel de profesionalidad.
Mirando hacia el futuro, el fácil acceso a herramientas con inteligencia artificial está permitiendo un nuevo avance en la creación de prototipos. Esto facilita las pruebas de mercado, una de las áreas donde las startups a menudo fracasan por falta de recursos, experiencia o conocimiento.
Por lo tanto, la evolución del emprendimiento continúa, y se espera que la inteligencia artificial juegue un papel cada vez más importante en este desarrollo.